El juez federal afirmó que el gobierno de Donald Trump desobedeció una orden judicial que prohibía la deportación de migrantes amparada en una antigua ley de 1798.
El migrante salvadoreño tenía estatus legal protegido, pero fue acusado de pertenecer a la pandilla MS-13, de acuerdo con el gobierno de Estados Unidos.
La directora de Amnistía Internacional calificó la expulsión de 238 venezolanos de Estados Unidos a El Salvador como un "desprecio manifiesto en materia de Derechos Humanos".
El reciente anuncio del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, sobre la disposición de su gobierno a recibir criminales estadounidenses y migrantes deportados en su megacárcel a cambio de una compensación económica ha generado una ola de críticas y preocupaciones en la comunidad internacional.