La petición de Granados se basaba en supuestas irregularidades por parte de la Fiscalía al momento de judicializar al exmandatario por presuntos delitos de fraude procesal y soborno a testigos.
Bernardo Moreno, estaba condenado por soborno a funcionarios para influir en la reelección del expresidente Uribe. La captura tuvo lugar en el Comando de Policía de Quindío.