Durante su discurso en Beijing, el mandatario chino reafirmó el compromiso de su país con el multilateralismo, el respeto mutuo y la no injerencia por parte de otros Estados.
Xi pidió unidad entre China y América Latina ante el auge del unilateralismo y las tensiones geopolíticas, destacando el rol del Sur Global en la cooperación global.
Desde Pekín, el primer mandatario llamó a construir un eje de relaciones internacionales basado en el "diálogo de civilizaciones", en contraposición al modelo del Estado-nación.
Tras el anuncio del deshielo comercial entre Washington y Beijing, el presidente Gustavo Petro insistió en la necesidad de que Colombia fortalezca su relación con China y supere los condicionamientos geopolíticos heredados.
El presidente Gustavo Petro participa en la cumbre China-CELAC como líder del bloque regional, fortaleciendo la cooperación bilateral centrada en el desarrollo sostenible.