La presidencia al Senado se definirá este jueves 20 de julio cuando iniica el segundo año legislativo.
Como es tradicional para esta época del año en el Senado, las decisiones políticas fundamentales no están muy claras, pero para el 2023 la situación parece ser más compleja que de costumbre. El principal cargo a elegir, el presidente del Senado, quien puede llegar a ser el jefe del Estado en una eventual pérdida definitiva del presidente y la vicepresidente de la República, le corresponderá en esta ocasión al Partido Alianza Verde, en donde están muy divididos para escoger a su candidato. Hasta la semana pasada en la mesa estaban tres nombres, los senadores Angélica Lozano, Inti Asprilla e Iván Name, pero este lunes se sumó al grupo el senador Ariel Ávila, quien es el más joven el Congreso de los cuatro, pues llegó tan sólo hasta el año pasado al Congreso. Pero la posibilidad de encontrar una concertación entre ellos cuatro está muy distante, en especial porque hay muchos intereses políticos.
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¿Qué divide al Partido Verde para decidir la presidencia del Senado?
Lo primera a señalar es que a hoy los verdes están divididos en dos tendencias, una que está con el presidente Gustavo Petro desde marzo del año pasado, y otro que son más independientes pero que apoyan en cierto nivel al gobierno. El senador Asprilla es el verde petrista que busca quedarse con este nombramiento y cuenta con el apoyo del mandatario nacional, mientras que la senadora Lozano es quien se inclina en el sector que cuestiona al presidente Petro y su gobierno. Iván Name se ha presentado como la tercería, porque si bien no está en ninguno de los grupos anteriores, sostiene que puede unir a su partido, sin embargo con la postulación de Ariel Ávila su nombre se debilita un poco.
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El senador Ávila sostuvo al respecto de su postulación que “he decidido busca la Presidencia del Senado para unir, dar tranquilidad y tender puentes en este momento político y los sectores cercanos Petro y los tradicionales que son muy distantes, soy un puente”. Explicó además porque considera que desde la Presidencia del Senado, se compromete a concertar las reformas con la conversación de todos los sectores, “con el objetivo de hacer una legislatura más tranquila”. Por último Ávila considera que garantiza independencia y coherencia al frente del cargo durante el año legislativo. Lo cierto es que este martes será definitivo para seleccionar el candidato y si no se logra, lo más seguro es que se irían divididos a la plenaria el jueves. En el caso de los liberales, en donde hay situación similar por la Presidencia de la Cámara, será sólo hasta el martes o incluso el miércoles cuando definan el tema.