La misión diplomática en Yenín, integrada por representantes de países europeos, tenía como objetivo evaluar directamente la crisis humanitario la Cisjordania ocupada.
El responsable del desmembramiento sería otro colombiano, Andrés Leonardo Gamboa Durán, quien ocultó el cuerpo en una maleta e intentó arrojarla al mar.
La investigación reveló que Le Pen y sus aliados políticos desviaron recursos europeos por más de 21 mil euros al mes para pagar a sus asistentes parlamentarios.