Claudia Sheinbaum recuerda a migrantes y heroínas en su primera ceremonia de Independencia

La presidenta Claudia Sheinbaum protagonizó un hecho histórico al convertirse en la primera mujer en encabezar el Grito de Independencia en México. Ante un abarrotado Zócalo, la mandataria dedicó la ceremonia a las mujeres y a los migrantes, un gesto simbólico que renovó una tradición encabezada exclusivamente por hombres durante más de un siglo.
“¡Viva México libre, independiente y soberano! (…) ¡Vivan nuestras hermanas y hermanos migrantes!”, exclamó desde el balcón presidencial. Sheinbaum también incluyó en su arenga el grito “¡Vivan las mujeres indígenas!”, que resonó con fuerza en la plaza principal de la capital.
La mandataria, que goza de una aprobación del 70% tras su triunfo electoral de 2024, recibió la bandera nacional de manos de una escolta integrada exclusivamente por cadetes mujeres, en otro acto cargado de simbolismo.
Migración y género, al centro del Grito
La referencia a los migrantes fue un reconocimiento a los cerca de 12 millones de mexicanos que residen en Estados Unidos, de los cuales unos 75.000 han retornado en el último año a raíz de las redadas ordenadas por el presidente Donald Trump. Al dedicarles el Grito, Sheinbaum buscó tender un puente con esta población, que ha sufrido las consecuencias de una política migratoria más restrictiva.
La inclusión de las mujeres como protagonistas marcó otra diferencia. La presidenta recordó a cuatro heroínas de la independencia —Josefa Ortiz de Domínguez, Leona Vicario, Mariana Rodríguez del Toro y Gertrudis Bocanegra—, un número mayor al tradicional, y se presentó como “presidenta con ‘a’” y “comandanta” de las Fuerzas Armadas.
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“Es un espacio que estaba tácitamente vedado para las mujeres”, señaló el historiador Lorenzo Meyer, quien destacó que la ceremonia refleja un cambio en la aceptación social del liderazgo femenino en México.
Un cambio en el imaginario
Miles de personas se congregaron en el Zócalo para acompañar la ceremonia, en medio de un ambiente festivo reforzado por conciertos y fuegos artificiales. Sin embargo, en estados como Sinaloa y Michoacán, las autoridades decidieron suspender las celebraciones debido a riesgos de violencia vinculados a la criminalidad organizada.
La comerciante Laura González, presente en la plaza, aseguró sentirse “muy emocionada” por presenciar un momento histórico: “Es la primera vez que una mujer presidenta da el Grito, y lo hace dedicándolo a nosotras y a quienes están en el extranjero”.
Tradición con origen disputado
El Grito de Dolores, recreado cada 15 de septiembre, evoca el llamado a la insurrección del sacerdote Miguel Hidalgo en 1810. No obstante, los historiadores coinciden en que el festejo fue consolidado años más tarde por el emperador Maximiliano de Habsburgo durante la intervención francesa, y luego institucionalizado por Porfirio Díaz en 1896 para hacerlo coincidir con su cumpleaños.
Más allá de su origen, la ceremonia de 2025 se recordará como la primera en la que la voz de una mujer se escuchó desde el Palacio Nacional para gritar “¡Viva México!”.